viernes, 3 de enero de 2020

Irkutsk. Siberia no es lo que creemos

Irkutsk, la capital de facto del Este siberiano, es una ciudad de casi 600.000 habitantes, antiguamente apodada la Paris de Siberia.

La gente que la visita, sobre todo en verano, aprovecha para hacer excursiones hasta el Lago Baikal, pero ahora en invierno las aldeas de la costa, a unos 70 kilometros de la ciudad no ofrecen mas que vistas de agua helada y alguna excursion con trineos de perros, por lo que con lo visto desde el tren me doy por satisfecho y aprovecho estos dos dias en la ciudad para relajarme y pasear.


Bordeando el rio. La temperatura va subiendo hasta el mediodia en que se llega a una maxima de 1 grado bajo cero. Luego va bajando de nuevo hasta los -10. Estoy teniendo suerte con el tiempo, son dias soleados que han hecho que las temperaturas se suavicen mucho con respecto a las pasadas semanas.





La calle mas importante de la ciudad es la calle de Carl Marx. Es la que tiene los edificios mas elegantes y  bonitos y los mejores comercios, cafeterías y restaurantes, aunque el número de ellos no sea lo más destacado de la ciudad.



Esta calle peatonal da directamente al antiguo Mercado Central, una especie de Moll sovietico modernizado...aunque no mucho.


Circo permanente. Esto no lo vemos en Europa. 


En la plaza principal de la ciudad se ha montado un gran arbol y algunas atracciones navideñas para los niños. Al parecer no dejaban entrar al simpatico animalito.


Habian bastantes esculturas de hielo aunque ninguna espectacular. Lo que me más me ha ha llamado la atención es un tobogán de tamaño considerable creado para la ocasión.


Las iglesias ortodoxas más importantes se concentran junto al rio. En el interior de una de ellas estaban lavando los frescos con agua y un cepillo. No parece una restauradora por lo que no auguro un gran futuro a estas obras de arte que decoran el interior de las iglesias....


En la otra orilla está el embarcadero, que ahora en invierno no parece tener ningun movimiento , supongo que porque gran parte del lago Baikal esta congelado y en temporada desde aquí salen hidrofoils hacia otras ciudades del Baikal.


Tranvía en la calle Lenin, la otra arteria comercial de la ciudad. Los símbolos soviéticos siguen de moda en Rusia.

En general debo decir que la ciudad me ha sorprendido gratamente, asi como su gente. Nada que ver ni lo uno ni lo otro con los estereotipos o al menos nada que ver con lo que yo pensaba que era una ciudad y las gentes siberianas. Irkutsk es una ciudad moderna, con muchisima gente joven que viste y vive como cualquier occidental. Puede que las infraestructuras esten algo anticuadas, pero los hoteles, restaurantes o nuevos centros comerciales estan a la altura de cualquier ciudad europea. Ademas se respira tranquilidad y seguridad en sus calles, algo que hasta ahora he visto igualmente tanto en Moscu como en Vladivostok.


Primera etapa en El Transiberiano

Las etapas en el Transiberiano cada uno se las programa como quiere, de Vladivostok a Moscú o viceversa, son 9.288 kilómetros que se se pueden hacer de un tirón en algo más de 146 horas, lo que no parece muy recomendable si quieres ver algo de este inmenso pais.  En mi caso he elegido hacer una gran primera etapa de 3 días y 3 noches que une Vladivostok con la capital de facto del Este de Siberia y que recorre 4.103 kilómetros muy cerca de las fronteras de China y Mongolia.


Mi tren  es el 001, cuyo nombre es "Rossiya", que es Rusia en ruso. Hay varios trenes que hacen este mismo recorrido cada día. Yo iré cambiando entre ellos, aunque el Rossiya es el que más usaré por ser el que menos paradas hace y por tanto el más rapido. Aunque todos los trenes que realizan el trayecto se diferencia poco en cuanto a comodidades y velocidad, los trenes de más categoría ahorran mucho tiempo aunque cuestan también  un poco más. 


El restaurante del tren no lo utilizan generalmente los rusos que llevan su propia comida y bebida. Sólo los turistas lo utilizamos un poco aunque no demasiado. A mi me gusta porque es un lugar comodo donde tomarte una cerveza o un café mientras observas el paisaje de forma tranquila y confortable, ya que tu cabina normalmente está ocupada por más gente y normalmente será rusa con lo que la comunicación es dificil.


Desde la ventanilla no es fácil tomar fotografías buenas por el movimiento y por los reflejos del doble cristal que además se va ensuciando por fuera según avanza el recorrido. 



Los ríos están en general congelados y las escasas poblaciones que se cruzan en el Este de Siberia están normalmente muy ligadas a los recursos naturales de la zona y su explotacion.



Dentro del tren la temperatura es de 22 grados o mas, por lo que casi todo el mundo va en manga corta en el tren, no obstante si vas a cambiar de vagon, para ir por ejemplo al restaurante, deberás pasar por las congeladas uniones entre vagones.


Los ferrocarriles rusos tienen una buena APP que te indica el trayecto con sus paradas y el tiempo que estará el tren en la estación, que oscila entre los 2 minutos en las más pequeñas a los 15 ó 18 en las medianas y 30 ó incluso algo más en las grandes. Así puedes decidir si te abrigas para salir al andén a comprar algo o simplemente a estirar las piernas.




Esta fue mi cena de fin de año, regada con vino valenciano.... con la famosa sopa de remolacha rusa, que estaba bastante buena y algo de queso para el vino. Luego comería unos medallones de ternera un tanto extraños.





En esta estación no hay gran cosa que ver, pero si es uno de los sitios más fríos habitados del planeta, con temperaturas que alcanzan a veces los 62 grados bajo cero. Yo me conformé con los -38 grados.




Llegamos al Lago Baikal, que es la reserva de agua dulce no congelada más grande del mundo (no incluye la Antártida que siempre está congelada) y contiene el 20 por ciento de todo el planeta. El lago tiene casi 700 kilómetros de largo y profundidades de casi 1.700 metros. En tren vamos a recorrer unos 200 por su ribera Sur. 





En los primeros kilómetros el lago se ve congelado hasta donde alcanza la vista aunque luego el hielo se va acumulando sólo en las orillas.







Este es uno de los 300 ríos que alimentan al lago. Todos ellos congelados, aunque obviamente el agua circula por debajo de la capa de hielo. Curiosamente sólo un río desagua parte del lago Baikal, el Río Angará, que atraviesa la ciudad de Irkutsk.



Llegada a la estación de Irkutsk, una de las más importantes del transiberiano. Aquí bajamos muchos y suben otros tantos.

Fachada de la estacion. Mi hotel está cerca así que me voy andando.


Desde el puente que cruza el río Angará puedo ver mi tren aún con el anden lleno de gente.


Hace frio, pero se lleva bien, actualmente la temperatura es de unos 12 grados bajo cero, pero sólo encima del puente se nota algo más de frío por el viento. En cualquier caso es muy fácil soportar esta temperatura con la ropa adecuada.